El ácido sulfhídrico es un gas disuelto en el agua, presente naturalmente en una gran cantidad de pozos que tienen condiciones anaeróbicas. Cuando el agua se expone al aire, se libera el H2S, lo que provoca un fuerte olor a huevo podrido. En concentraciones bajas, el H2S genera molestia y mal estar y en altas concentraciones, puede generar irritación, tos, daño ocular y hasta la muerte. Tratar agua con ósmosis inversa no permite remover el H2S ya que es un gas. La única solución es con una adsorción con FERROLOX®, el cual puede remover un equivalente de hasta 20% de su peso seco de H2S. El sulfuro

¿Cuál es la importancia del estado de oxidación del arsénico?

El arsénico en su estado de oxidación como arsenato (As (V)) se remueve más efectivamente con procesos de adsorción que el arsenito (As (III)). Esto también aplica para nuestro FERROLOX®. En aguas superficiales, la forma predominantemente del arsénico es As (V) ya que ha estado en presencia de suficiente oxígeno; mientras que por la falta de oxígeno en las aguas subterráneas el arsénico se encuentra usualmente como As (III) o una combinación de ambos.

FERROLOX®, un granulado férrico patentado

FERROLOX® es un granulado patentado de hidróxido férrico y el más eficaz para remover el fosfato del agua. Las propiedades únicas del adsorbente FERROLOX pueden adsorber una concentración residual de fosfatos en menos de 50 µg/l en forma de PO4 (< 20 µg/l como P5+) que es aceptable para cumplir con cualquier regulación. El nivel de pH y la concentración de los fosfatos tienen un fuerte efecto en la capacidad de adsorción del hidróxido de hierro. FERROLOX® puede ser reactivado y reutilizado para reducir costos, lo que representa la mayor ventaja frente al uso de intercambio iónico o de membranas para remover fosfatos.

Los residuos de metales pesados se han vueltos un tema muy serio

Los residuos de metales pesados provenientes de las purgas de sistemas de enfriamiento en la industria se han convertido en un gran problema y una gran preocupación a nivel mundial. Uno de los mayores preocupantes es el cobre que puede liberarse como resultado de electro-corrosión de los sistemas de torres de enfriamiento en presencia de otros metales en el agua de alimentación. Este tipo de corrosión también puede afectar componentes como bombas, bobinas condensadoras, intercambiadores de calor y otras superficies de los equipos. El cobre también se puede encontrar en los biocidas como la isotiazolina. Es posible que el agua de alimentación solo contenga bajas concentraciones de metales pesados o de cobre. Sin embargo, estos metales se concentran altamente por el ciclo del agua de las torres de enfriamiento.